El capítulo 15 del último libro de Morgan Housel comienza: «Nadie dijo que fuera fácil. Todo lo que merece la pena exige un poco de dolor».
Jeff Bezos dijo una vez: «Todos los trabajos tienen partes que a uno no le gustan. Y tenemos que decirlo: eso forma parte de la vida laboral».
Aunque llevo casi 3 años con Aprendizaje Infinito, sólo durante los últimos 6 meses ha sido mi trabajo. Ya tengo claro lo que no me gusta: vender. Es irónico que te lo diga en un texto para convencerte de que accedas a la membresía.
Cuando el dinero entra en la ecuación, es demasiado fácil engañarse. Los incentivos pueden hacer que la gente justifique y defienda casi cualquier cosa. Por eso, aunque haya más de 5 mil personas leyendo estos textos, todavía no hay patrocinios en Aprendizaje Infinito. Poner precio a mis recomendaciones es un dolor que no estoy dispuesto a asumir.
Housel cierra el capítulo 15 proponiendo un cambio de perspectiva. En lugar de: ¿cómo evitar esa ineficiencia?, pregunta: ¿cuál es la cantidad de ineficiencia que tengo que soportar para poder seguir funcionando en un mundo caótico e imperfecto?
El dolor que he elegido asumir es crear una parte de pago. Hay personas que conectan con los textos, quieren más y están dispuestas a pagar por ello. El proyecto se sostiene económicamente. Los miembros acceden a ediciones donde profundizar en las ideas y a una comunidad donde compartir reflexiones con otros eternos aprendices. Creo que estos incentivos son mucho mejores que los de la publicidad; por eso apuesto por ellos, aunque así sea más difícil llegar a la rentabilidad.
Este texto recordándote que hay una membresía es parte de esas pequeñas ineficiencias que estoy dispuesto a asumir para poder dedicarme a escribir y a compartir mis ideas. Sigo sintiéndome incómodo vendiendo. El curso de marketing de turno me diría que son creencias limitantes mías, que el dinero es una energía que fluye o alguna tontería de ese calibre para poder dormir tranquilo con las barbaridades que proponen.
Yo creo que es buena señal acercarse con ciertos reparos a la venta. Significa que todavía no he perdido el respeto por el tiempo y la atención que compartes conmigo al leerme. Significa que no vale cualquier jugarreta para ganar unos cuantos euros. Significa que los contenidos de la membresía tienen que estar a la altura, y creo honestamente que lo están. Te invito a descubrirlo por 9€.
Conviértete en miembro de Aprendizaje Infinito
Sergio-.
P.D: Si no te animas con la membresía, ¿hay algo que te haría cambiar de opinión? Puede que sea una ineficiencia que esté dispuesto a asumir :)
Gracias por tu tiempo y tu atención.
El viernes, la reflexión de la semana. Y si te animas con la membresía: el domingo, la sexta edición de Señales.