perderme por las calles de una ciudad ... curiosamente hasta en la ciudad de Madrid donde vivo desde hacer mas de 20 años sigo encontrando lugares donde perderme. Y también curioso como de cada uno de estos "viajes de exploración" vuelvo siempre con más de lo que tenía ... para luego volver a menudo a un par de mis restaurantes favoritos. Me encanta el equilibrio que haces claro de una vida entre explorar y explotar y sobre todo tu frase /concepto final "Encuentra TUS propias respuestas. Encuentra TU propia armonía."
Importantísimo esa idea que dejas caer entre líneas de que lo que acabamos explotando es lo que traemos de nuestros viajes de exploración. Gracias por el comentario, Daniel.
Considero muy importantes los últimos dos párrafos.
Asociamos la reflexión a la inacción, la asimilamos a la no producción. Creo que nos equivocamos. Repensar o reflexionar sobre diferentes aspectos de nuestra vida marca la diferencia en nuestras acciones posteriores. Recuperar o mantener esa curiosidad por el mundo revive la chispa que el sistema tiende a apagarnos. Estamos tan habituados al mundo que nos ha dejado de asombrar. Salir de la rueda de rendimiento y productividad, aunque sea por un rato, puede salvarnos.
Es cierto que a veces se hace difícil encontrar momentos para ello, pero en gran medida porque nos hemos habituado a regalar en exceso nuestra atención a cosas que no lo merecen, hay que pelearlo. Dar el valor necesario a este aspecto (la curiosidad) es clave para encontrar las alternativas que puedan mejorar nuestra vida.
Al final es proteger lo que Nuccio Ordione llamaba inutilidad que, paradójicamente, acaba siendo lo más útil para nuestra vida. Gracias a ti por el comentario y estar al otro lado, Claudia.
perderme por las calles de una ciudad ... curiosamente hasta en la ciudad de Madrid donde vivo desde hacer mas de 20 años sigo encontrando lugares donde perderme. Y también curioso como de cada uno de estos "viajes de exploración" vuelvo siempre con más de lo que tenía ... para luego volver a menudo a un par de mis restaurantes favoritos. Me encanta el equilibrio que haces claro de una vida entre explorar y explotar y sobre todo tu frase /concepto final "Encuentra TUS propias respuestas. Encuentra TU propia armonía."
Importantísimo esa idea que dejas caer entre líneas de que lo que acabamos explotando es lo que traemos de nuestros viajes de exploración. Gracias por el comentario, Daniel.
Considero muy importantes los últimos dos párrafos.
Asociamos la reflexión a la inacción, la asimilamos a la no producción. Creo que nos equivocamos. Repensar o reflexionar sobre diferentes aspectos de nuestra vida marca la diferencia en nuestras acciones posteriores. Recuperar o mantener esa curiosidad por el mundo revive la chispa que el sistema tiende a apagarnos. Estamos tan habituados al mundo que nos ha dejado de asombrar. Salir de la rueda de rendimiento y productividad, aunque sea por un rato, puede salvarnos.
Es cierto que a veces se hace difícil encontrar momentos para ello, pero en gran medida porque nos hemos habituado a regalar en exceso nuestra atención a cosas que no lo merecen, hay que pelearlo. Dar el valor necesario a este aspecto (la curiosidad) es clave para encontrar las alternativas que puedan mejorar nuestra vida.
Gracias Sergio,
Tus post nos ayudan a mantener esa chispa
Al final es proteger lo que Nuccio Ordione llamaba inutilidad que, paradójicamente, acaba siendo lo más útil para nuestra vida. Gracias a ti por el comentario y estar al otro lado, Claudia.